miércoles, 19 de septiembre de 2007

Las flores de la disculpa

Quiero comprar flores para esas tantas mujeres enojadas, como niños sin el juguete nuevo, no hay otra cosa que las conforme mas que eso "que no pueden tener", nosotros en el fondo hacemos lo mismo. Histéricos plurales actuando el juego en un teatro sin publico, ni aplausos con titiriteros. Y su replica me enfrenta, sin un beso de amor me da vuelta la cara, me deja y se aleja. El camino de la sien hacia mis ojos se hace ondo y se embarra con la lluvias de miles de lágrimas caer. Ahora no se si estoy hablando de ti es una suerte de monologo de locos que tienen que encontrar una excusa para olvidar, para dejar de pensar. Para irse y no volver a la fantasía de lo que uno no puede tener. A las largas horas de aburrimiento para que al final la bocina de un auto marque el inicio de una nueva cita. Cuantas veces el mismo dibujo y las flores de tu estanque flotan con la luz de una vela apagada. Mas allá de mis lineas, de todo lo que escribo, sigo siendo un humano recorriendo el camino. No me juzgues sin hechos, no te enojes conmigo.

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